En este artículo, exploraremos qué es el Síndrome del Edificio Enfermo y cómo prevenir que esta "enfermedad" afecte tanto a vuestro hogar como a vuestro entorno de trabajo mediante las soluciones vegetales.
¿Qué es el Síndrome del Edificio Enfermo?
El Síndrome del Edificio Enfermo (SEE) no constituye una enfermedad en sí misma, sino más bien en un conjunto de afecciones que pueden impactar a quienes ocupan un espacio, derivadas de la calidad del aire dentro de una construcción. Según la OMS, alrededor del 30% de los edificios en todo el mundo podrían presentar esta problemática y, entre el 20% y el 30% de sus ocupantes, podrían sufrir afecciones o síntomas relacionados con la irritación de las mucosas, fatiga u otros problemas de salud de origen poco identificable.
Los edificios con Síndrome del Edificio Enfermo pueden clasificarse en:
- Temporalmente enfermos: por ejemplo, edificaciones recién construidas, donde los síntomas de sus habitantes disminuyen a medida que se eliminan los residuos de los materiales de construcción presentes en el ambiente.
- Permanentemente enfermos: donde los síntomas persisten durante años entre los usuarios debido a problemas de ventilación, iluminación, climatización u otras causas que perpetúan la situación.
Para poder combatir esta “enfermedad”, cada vez son más las empresas y los particulares que se decantan por la instalación de soluciones vegetales, dado que contribuyen de forma natural a mejorar la calidad del aire de un edificio y mejoran la calidad de vida de los habitantes en él.
En Vivers Ter, recientemente hemos trabajado en la instalación de un jardín interior en los espacios comunes de un edificio en Barcelona con el objetivo de aportar vida a un entorno cerrado y hermético. Se dispuso una amplia combinación de plantas para interiores con su propia instalación de autorriego, de forma que no requieren de un cuidado excesivo por parte de los habitantes del edificio.
Se instaló un jardín vegetal interior junto a una pared vegetal para crear zonas verdes y de descanso, que combinaba distintas especies de plantas de hojas verdes, como por ejemplo, kentias, calatheas, palmeras de bambú, ficus robustas, helechos, monsteras deliciosa, alocasias, dracaenas, entre otras especies para ambientar el jardín con un aire tropical.
Esta solución vegetal no solo es atractiva a nivel decorativo, sino que también forma parte de la arquitectura del edificio, aportando valor a la estructura y beneficiando a sus habitantes con la mejora de la calidad del aire, la regulación de la temperatura y la acústica de forma natural.
Cómo identificar un edificio con Síndrome del Edificio Enfermo
Existen indicios que pueden ayudar a reconocer un edificio afectado por este síndrome:
- Ausencia de circulación de aire fresco o presencia de un sistema de ventilación deficiente.
- Distribución de aire que genera estratificaciones y áreas sin ventilación.
- Unidades de renovación y recuperación de aire de baja calidad constructiva, ocasionando contaminación cruzada.
- Filtración del aire de manera incorrecta.
- Empleo de materiales de construcción de baja calidad.
- Revestimiento de suelos y paredes con textiles.
- Ubicación del edificio en zonas elevadas o con alta polución ambiental.
Síntomas del Síndrome del Edificio Enfermo
Los síntomas entre los habitantes de un edificio con Síndrome de Edificio Enfermo pueden manifestarse de diversas maneras:
- Irritación ocular, nasal y bucal.
- Sequedad en las mucosas.
- Ronquera y dificultad para respirar.
- Erupciones cutáneas, dolores de cabeza, fatiga mental y náuseas.
- Mareos, vértigo, resfriados y mayor incidencia de enfermedades respiratorias.
Por lo general, estos síntomas tienden a ser mucho más notorios por la tarde que por la mañana y pueden afectar a los usuarios que no tienen control sobre las condiciones del edificio. En muchos casos, los síntomas desaparecen de forma inmediata con el contacto con el aire libre o pueden persistir durante varios días. Es crucial considerar que la ventilación en un edificio juega un papel clave en el agravamiento o atenuación de estos síntomas del Síndrome del Edificio Enfermo.
¿Cómo solucionar el Síndrome del Edificio Enfermo?
Abordar el Síndrome del Edificio Enfermo requiere de una investigación detallada para identificar las soluciones más adecuadas en cada caso. Empezar por una revisión inicial es fundamental para plantear y comprender el problema. Esto puede implicar desde la reinstalación o mejora de los sistemas de climatización hasta el diseño de soluciones vegetales para mejorar la calidad del aire en espacios interiores, como hemos realizado recientemente en Barcelona, instalando un jardín interior completo y una pared vegetal en las zonas comunes del edificio para mejorar la recirculación del aire interior.
La integración de zonas verdes en edificios es una solución que ha ganado fuerza en los últimos años. Las ventajas y los beneficios de las soluciones vegetales son múltiples, desde mejorar la calidad del aire y la regulación de la temperatura de manera natural hasta crear ambientes acogedores que benefician la salud y el bienestar de los habitantes. Si estáis buscando alternativas para abordar el Síndrome del Edificio Enfermo en vuestro entorno, en Vivers Ter somos especialistas en soluciones vegetales para una amplia gama de construcciones, desde viviendas hasta oficinas y edificaciones públicas. En Vivers Ter creemos firmemente que las soluciones naturales pueden crear espacios limpios, agradables y respetuosos con el medio ambiente. ¡No dudéis en contactarnos para encontrar una solución para vuestro entorno!