Las islas de calor en el cambio climático

24/05/2022

Debido al aumento de la población mundial, la construcción se ve obligada a responder a esta enorme demanda. La continua urbanización de zonas antes agrarias y el crecimiento de las ciudades sustituyendo la vegetación propia del terreno por carreteras, edificios e infraestructuras al servicio del ser humano, provoca las islas de calor.

¿Qué es el efecto isla de calor?

La principal consecuencia de las islas de calor es que las superficies que una vez fueron permeables y húmedas pasan a ser impermeables y secas. Es por lo que las zonas urbanas tienen temperaturas más elevadas que las rurales. 

La temperatura media del aire de una ciudad con un millón de habitantes es de 1 ºC a 3ºC más alta que los alrededores. La diferencia de temperatura puede llegar a los 12ºC en una noche despejada. 

islas de calor urbano

Está demostrado, que las altas temperaturas pueden afectar a la salud de los habitantes de las ciudades, provocando malestar general, problemas respiratorios, insolaciones, deshidratación, cansancio e, incluso, aumentar la mortalidad por golpes de calor.

Por otra parte, la demanda eléctrica aumenta en el punto máximo de las islas de calor entre un 1.5% y 2% cada 0,6ºC. Esto quiere decir que entre un 5% y un 10% de la población consume electricidad para compensar el impacto de las islas de calor.  En esta situación, las centrales eléctricas deben funcionar a una carga más elevada, lo que genera mayores cantidades de emisiones de gases de efecto invernadero, lo que afecta a la salud humana, provoca dificultades respiratorias y agotamiento.

 

¿Cómo podemos reducir  el efecto isla de calor sin incrementar consumo eléctrico?  

 

1) Aumentando el área de sombra alrededor de los edificios mediante jardines verticales:

La instalación de jardines verticales en la fachada de los edificios residenciales o de uso público, reducirá la temperatura del aire y de la superficie, ya que proporcionará sombra y enfriamiento a través de la evapotranspiración. La plantación de árboles y de vegetación que den sombra directamente a la vivienda, pueden disminuir la necesidad de sistemas de aire acondicionado, hacer que el hogar sea más cómodo y reducir el costo de la factura de electricidad. 

Las plantas también protegen la salud de las familias, ya que mejoran la calidad del aire, proporcionan sombra para actividades al aire libre y reducen la exposición a la radiación ultravioleta nociva a la vez que reducen el ruido exterior de la vivienda.  

 

 pared-vegetal.jpg    efecto-isla-de-calor-edificios.jpg

 

2) Instalar cubiertas vegetales:

Un techo vegetal, es una capa vegetativa que crece en la cubierta del edificio. Los techos ecológicos proporcionan sombra y protegen del calor del aire a través de la evapotranspiración, lo que reduce la temperatura de la superficie del techo y del aire circundante. Los techos ecológicos absorben el calor y actúan como aislantes para el hogar. Además, reducen la energía que se necesita para proporcionar refrigeración y calefacción (lo cual disminuye el costo de la factura de electricidad), mejoran el confort interior y disminuyen el golpe de calor asociado a las olas de calor. También son un aislamiento acústico natural muy eficaz.

 

efecto-isla-de-calor.jpg     cubierta-vegetal.jpg     tepe-sedum-flor.jpg

 

¿Cómo tratar con las islas de calor en las ciudades? 

Así pues, el camino más efectivo y económico, para mitigar el efecto isla de calor incluye “vegetalizar” las ciudades, instalando cubiertas y fachadas vegetales en los edificios ya existentes o de nueva creación cuyos beneficios están más que demostrados. También es necesario crear zonas verdes de uso público, lagos urbanos y un mejor diseño de las calles.

En Vivers Ter somos especialistas en la producción, instalación y mantenimiento de cubiertas y fachadas vegetales, nuestra experiencia nos avala y estaremos encantados de dar la mejor solución a su proyecto.